Hace mucho tiempo, una anciana profesora de la Escuela Real de Ballet de Mónaco, a quien las primeras bailarinas de todo el mundo respetan mucho, visitó Japón.
Ella habló en ese momento sobre el significado de la existencia de un artista.
Ella dijo: "Los artistas son importantes porque son los únicos que pueden arrojar luz sobre las verdades ocultas y ocultas y expresarlas".
Nadie discutiría sus palabras.
No es exagerado decir que Masayuki Takayama no solo es el único periodista del mundo de la posguerra, sino también el único artista del mundo de la posguerra.
Por otro lado, muchos de los que se hacen llamar artistas, como Oe, Murakami e Hirano, ni siquiera merecen el nombre de artista.
Solo han expresado las mentiras creadas por Asahi Shimbun y otros en lugar de arrojar luz sobre las verdades ocultas y contarlas.
Su existencia no se limita a Japón, sino que es la misma en otros países del mundo.
En otras palabras, solo existe un número mínimo de artistas reales.
Lo siguiente es de la columna serializada de Masayuki Takayama que marca el final de Weekly Shincho, que se lanzó hoy.
Este artículo también prueba conmovedoramente que tengo razón cuando digo que nadie en el mundo de hoy merece el Premio Nobel de Literatura más que Masayuki Takayama.
La caída de Jiang Zemin
En junio de 1989, el gobierno de Beijing estaba molesto por los estudiantes que se reunieron frente a la plaza de Tiananmen y gritaron por la democracia, por lo que envió tanques para atropellarlos o dispararles.
El incidente de la Plaza de Tiananmen, como se le llama, fue mal visto por el mundo, y las potencias occidentales se aislaron de China.
China ya no podía esperar dinero de Occidente.
La Unión Soviética los habría ayudado en tal situación, pero no pudieron salir del atolladero afgano y no pudieron permitirse cuidar de China.
¿Entonces lo que hay que hacer?
El astuto Deng Xiaoping instaló al humilde Jiang Zemin como secretario general.
A su padre, Jiang Shijun, no le gustaba el régimen de Chiang Kai-shek respaldado por Estados Unidos y eligió el gobierno de Wang Jingwei Nanjing, alineado con los japoneses.
Su hijo siguió su ejemplo y se unió a la Universidad Central de Nanjing, donde tuvo muchos tratos con los japoneses.
Cuando estaba borracho, cantaba y bailaba el Tankobushi.
Según los libros de historia japoneses, cuando Japón perdió, adoptó de inmediato a su tío para evitar la calumnia de ser el "hijo de un traidor chino".
Fue así como Jiang Zemin pudo ascender constantemente en el mundo.
Sin embargo, si una persona astuta de Shina piensa que un hijo de un traidor chino fue designado como secretario general sin saber lo que saben los japoneses, se equivoca al pensar así.
Deng Xiaoping, por supuesto, estaba al tanto de los orígenes de Jiang y no tuvo más remedio que pasar por encima de Japón para superar esta difícil situación.
Pensó: "Pongamos a alguien que pueda hacer eso a cargo.
Jiang planeó invitar al emperador a China.
Una vez que el emperador estuvo en Beijing, aseguró el regreso de China a la comunidad internacional.
Así que envió a Wu Xueqian, el viceprimer ministro, a Japón.
Wu fue el hombre que vino a Japón cuando el periódico Asahi Shimbun afirmó falsamente que el Ministerio de Educación había obligado a los japoneses a reescribir la invasión de Japón como un avance en el examen de libros de texto.
Desde entonces, Wu ha estado en el bolsillo del burócrata de asuntos exteriores Sakutaro Tanino y Seiki Watanabe de Asahi.
Wu usó ambos para realizar las caricias y las maniobras de puerta trasera que hicieron posible la "visita del emperador a China".
Jiang inició la diplomacia para cambiar abruptamente su actitud hacia Japón después de esto.
En su posterior "Jiang Zemin Wenzhi", Jiang hizo como base de su diplomacia con Japón que "el ejército japonés fue brutal y mató a 35 millones de personas en los 15 años transcurridos desde la invasión de Manchuria" y ordenó a "Japón que siguiera hablando de la problema de la historia para siempre.
También inculcó el sentimiento antijaponés en la gente.
Se construyeron monumentos antijaponeses en cada ciudad.
Jiang pagó la construcción con la AOD de Japón.
Los libros de texto de la escuela secundaria incluían imágenes del Incidente de Jinan y lo enseñaban como "los actos crueles del ejército japonés".
Era una foto de la autopsia de una mujer japonesa de 24 años asesinada por soldados chinos que le cortaron las orejas, la nariz y los senos y luego la apuñalaron en la región púbica con un palo.
En Japón, la foto se consideró demasiado espantosa para ser publicada, pero Jiang la usó como evidencia de "experimentación biológica con una mujer china".
Durante una visita a los EE. UU. en 1997, Jiang hizo todo lo posible para pasar por Pearl Harbor en Hawái y dijo: "Japón es el enemigo conjunto de los EE. UU. y China", como Inajiro Asanuma.
Cuando Jiang visitó Japón, apareció vestido de civil en una cena de estado y soltó: "No olviden la historia de Japón como nación agresora.
Sabe que la historia de Jiang, incluida la Masacre de Nanjing, es una completa mentira.
Dijo tales mentiras frente a Su Majestad el Emperador de Japón, quien había salvado a China de una situación problemática.
Todos los presentes estaban furiosos por el comentario de Jiang Zemin.descortesía.
Después de un tiempo, Su Majestad le preguntó a Tadashi Ikeda, Director General de la Oficina de Asuntos Asiáticos, de manera antonímica: "¿Fue bueno para él ir a China?
El Asahi informó rápidamente (30 de octubre de 2005) que "Su Majestad dijo que su visita a China fue 'buena'", cortando parte de sus palabras.
No importa cómo lo expresara Asahi, sus palabras parecían estar imbuidas de una sólida desconfianza e ira hacia China.
Sin embargo, contrariamente a los deseos de Su Majestad, los súbditos de hoy no piensan en ello.
Simplemente han seguido la tendencia actual, cantando "amistad Japón-Shina" y vertiendo AOD en el país.
Incluso después de que China se convirtiera en una amenaza para Japón, se recortó el presupuesto de defensa y el superávit se utilizó para la AOD a China.
Jiang Zemin falleció el otro día.
El editorial de Asahi lamentó su muerte y elogió su flexibilidad para convertir incluso a los capitalistas, por ejemplo, en miembros del partido.
¿Pero no es eso lo que debería describirse como meramente laxo?
Más importante aún, la AOD de Japón de la que se había estado atiborrando terminó este año, 42 años después.
Jiang Zemin murió como si lo hubiera estado esperando.
¿No es esto similar a la sanguijuela que chupa toda la sangre de una persona y luego se la quita?
